En Encuentros Naturales organizamos talleres de conexión con la NATURALEZA.
Nuestro objetivo es recuperar la Consciencia Natural, el significado más profundo de lo que representa el conectarse con ella. Por como evolucionan los acontecimientos parece ser que como especie, lo hemos olvidado, sufrimos de amnesia.
Nuestro entorno y nuestro ritmo de vida nos están llevando a sufrir en el desequilibrio de nuestra energía y a vivir desconectados de nuestro verdadero origen.
Recordemos que, aunque ahora la mayoría de la población viva rodeada de asfalto, durante muchos milenios la vida del ser humano ha estado íntimamente relacionada con la Naturaleza. Las tribus ancestrales que hoy nos pueden parecer una anécdota curiosa o un retraso evolutivo en realidad nos muestran como ha sido nuestra vida hasta hace bien poquito, todo es mucho más reciente de lo que nos imaginamos y mucho más importante para nuestra supervivencia como especie de lo que somos conscientes.
Esta forma de vida es la que nos ha condicionado y formado como especie. Y aquí no sólo hablamos de lo material, de creencias, de formas de vida o de mera supervivencia. Esto sería quedarse en la anécdota.
En realidad hay algo más y algo que hemos olvidado … parece que no somos conscientes de que nuestro hogar está en y es Gea, nuestra Madre Tierra y que es ella la que nos alimenta. Una vez más os pedimos que ampliéis vuestra visión, no os quedéis sólo en lo material ... ¿la especie humana es consciente que es SU energía la que la sostiene? Sin ella tenemos los días contados.
Desde Encuentros Naturales expresamos que nuestro deseo es facilitar el poder vivir experiencias de conexión con la energía de Gea. Posibilidades hay muchas, en el Aterlier encontraréis varias y una de ellas es de la que yo me ocupo, el Bosque.
Los árboles han acompañado a la humanidad desde los albores de su historia, siendo fuente de inspiración, objeto de leyendas y testigos de innumerables historias. En la actualidad han caído en el olvido. Pasamos continuamente cerca de ellos sin hacerles caso, sin comprender su presencia silenciosa y su mensaje. Son seres que casi nadie escucha, hemos olvidado que están vivos, que en ellos hay una energía que los anima y que tienen una consciencia plenamente desarrollada.
Además de ser nuestros amigos, pueden y quieren ayudarnos, pero no saben como hacerlo. Hemos perdido nuestra capacidad de conectar con ellos.
Esperamos que con nuestras actividades encontréis un camino. La forma de hacerlo es simple sólo os pedimos que mantengáis la mente abierta a vivir nuevas experiencias. Un encuentro con ellos puede reequilibrar vuestra energía y ayudaros a despejar vuestras dudas además de ir recuperando poco a poco esa memoria olvidada de la que hablamos. Es probable que acabéis sorprendiéndoos con el resultado.
Los árboles son energías muy diferentes a la nuestra y para poder sintonizar con ellos debemos preparar nuestro cuerpo y nuestra mente. Es por esto que la idea de estos talleres es combinar el senderismo con otras actividades. Así que, aparte de caminar por el bosque, haremos ejercicios de respiración, relajación y auto-masaje, para poder conectarnos con nuestro cuerpo, liberándolo de tensiones y recargándolo de energía vital. Para trabajar el aspecto mental nos serviremos de herramientas como la contemplación, la meditación consciente y alguna que otra visualización aprovechando el entorno del Bosque.
Esperamos que de esta forma viváis un montón de sensaciones muy agradables. Después de asistir a uno de nuestros talleres, al mirar a un árbol, seguramente podréis reconocer al ser vivo que hay en él, vuestra mirada será otra (quizás en ella haya agradecimiento) y esperamos que el conocimiento adquirido os ayude a respetarlos, quererlos y protegerlos.
Desde los inicios de la civilización, en el encuentro ser humano - árbol, éste último es el que suele salir perdiendo. A pesar de todo el bosque sigue estando presente ofreciéndonos sus regalos ... pero ¿por cuanto tiempo más?
La civilización se inició con la tala del primer árbol y se acabará cuando desaparezca el último.
La civilización se inició con la tala del primer árbol y se acabará cuando desaparezca el último.
