¡Buenas noches!
El próximo taller que tenemos previsto está programado para el 13 de este mes. Yo optimista como soy quería poder disfrutar del otoño en el magnífico hayedo de la Grevolosa, cuando las hojas cambian de color y su magia está en el punto más álgido .... ¡pero no estoy segura de que esto pueda ser!
A pesar del extraño calor que ha estado haciendo en las últimas semanas, los árboles han seguido su ciclo natural así que probablemente esta semana sea la última en la que poder disfrutar de su compañía, quizás sea la última en la que todavía estén despiertos ... bueno, por si no lo sabéis, los árboles que pierden sus hojas pasan el invierno durmiendo.
Si finalmente no nos es posible ir a la Grevolosa, había pensado disfrutar de la compañía de las encinas y los alcornoques.
Pasaremos de la suavidad del hayedo que experimentamos en el taller de octubre a sentir la fortaleza de estos majestuosos árboles. Conectar con esta energía sin duda nos ayudará a fortalecer nuestro cuerpo y nuestra mente.
Para que os hagáis una idea de su personalidad os transcribo un pequeño fragmento del libro "Los árboles, energías vivas" (Ed Integral) que habla de la Encina, prima hermana del Alcornoque:
"La Encina es un árbol que encierra en su energía grandes cualidades; de carácter sobrio y orgulloso, yergue su robustez manifestando en su porte el dominio de su territorio. Pese a su apariencia fuerte y tosca posee también un corazón noble y fácil de penetrar. No es un árbol que rechace el contacto con el Hombre, aunque le gusta mucho sentirse halagado y respetado.
Excelente contenedor y emisor energético, la Encina es el árbol idóneo para conseguir una buena carga de energía. Sus cualidades potenciales penetran en el organismo humano nutriéndolo, alimentando canales y circuitos y actuando como un auténtico reconstituyente general."
Así que nada, ¡espero veros en breve!
El próximo taller que tenemos previsto está programado para el 13 de este mes. Yo optimista como soy quería poder disfrutar del otoño en el magnífico hayedo de la Grevolosa, cuando las hojas cambian de color y su magia está en el punto más álgido .... ¡pero no estoy segura de que esto pueda ser!
A pesar del extraño calor que ha estado haciendo en las últimas semanas, los árboles han seguido su ciclo natural así que probablemente esta semana sea la última en la que poder disfrutar de su compañía, quizás sea la última en la que todavía estén despiertos ... bueno, por si no lo sabéis, los árboles que pierden sus hojas pasan el invierno durmiendo.
Si finalmente no nos es posible ir a la Grevolosa, había pensado disfrutar de la compañía de las encinas y los alcornoques.
Pasaremos de la suavidad del hayedo que experimentamos en el taller de octubre a sentir la fortaleza de estos majestuosos árboles. Conectar con esta energía sin duda nos ayudará a fortalecer nuestro cuerpo y nuestra mente.
Para que os hagáis una idea de su personalidad os transcribo un pequeño fragmento del libro "Los árboles, energías vivas" (Ed Integral) que habla de la Encina, prima hermana del Alcornoque:
"La Encina es un árbol que encierra en su energía grandes cualidades; de carácter sobrio y orgulloso, yergue su robustez manifestando en su porte el dominio de su territorio. Pese a su apariencia fuerte y tosca posee también un corazón noble y fácil de penetrar. No es un árbol que rechace el contacto con el Hombre, aunque le gusta mucho sentirse halagado y respetado.
Excelente contenedor y emisor energético, la Encina es el árbol idóneo para conseguir una buena carga de energía. Sus cualidades potenciales penetran en el organismo humano nutriéndolo, alimentando canales y circuitos y actuando como un auténtico reconstituyente general."
Así que nada, ¡espero veros en breve!
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